martes, noviembre 01, 2005

Robert F. Barsky presenta la biografía “Noam Chomsky, una vida de discrepancia”.



De la amistad entre Robert F. Barsky, el autor del libro, y Noam Chomsky surgió una profunda admiración que tiene como culmen "Noam Chomsky, una vida de discrepancia" (Península). Después de años de discusiones y charlas por correspondencia, este profesor de Lengua y Literatura de la Universidad de Ontario se ha decidido a mostrar la vida profesional y el entorno social y afectivo del pensador estadounidense.

Publica El Mundo en su edición del 30/9/2005

Por Miguel Portillo

El autor presenta este trabajo como "la autobiografía que Chomsky nunca escribiría", sin embargo, leyendo el libro parece que la falsa modestia sea la única razón por la que el mismo Noam Chomsky no firma este libro.

Dice de él que es "el intelectual vivo más importante del planeta", y que su importancia es tal que las generaciones venideras lo verán como ahora nosotros vemos a genios como "Newton, Mozart, Galileo, Descartes y Picasso".

Admirador de la obra y del inconformismo de Chomsky, lejos de repasar sus pensamientos vitales, Robert F. Barsky prefiere centrarse en su evolución como profesional para conocer su camino de formación. Su paso por la Universidad, sus primeros trabajos como profesor, su tesis doctoral, sus primeras innovaciones en lingüistica y, por supuesto, sus primeros trabajos filosóficos.

Actividad antisistema

Los capítulos más elocuentes son los de su activa vida como ciudadano disconforme y rebelde con la sociedad. Sus inicios en organizaciones judías y cristianas, sus primeras manifestaciones antisistema, sus multitudinarias conferencias sobre la organización económica mundial, y así hasta llegar a sus últimos trabajos contra la guerra de Irak.

Una de las ideas centrales es mostrar cómo forma, a lo largo de los años, su postura disconforme y comprometida con la nueva sociedad, de la que dice que "Chomsky ha observado un creciente cinismo del pueblo estadounidense, una convicción de que el sistema político tiene claros prejucios en su contra y que el verdadero poder político ya no está a su alcance".

Barsky repasa y representa el crecimiento y el enriquecimiento de Chomsky como persona. Así, el lector, podrá entender mejor la evolución de su pensamiento y su "modus operandi" por los ambientes familiares y por su educación universitaria, aunque lejos quedará el análisis en profundidad de sus pensamientos, de sus trabajos y de sus críticas. Dentro de su vida repasa, por ejemplo, la importancia religiosa, donde a la vez alaba y critica el judaísmo, como muestra de imparcialidad y que Barsky resume así:

"Un amplio segmento de la población judía estadounidense ha tachado a Chomsky de "antisionista". Ésto ha sido porque evalúa las acciones del Gobierno israelí en función de los mismos criterios que emplea para juzgar las acciones de cualquier Gobierno".

Como conclusión enumera sus relaciones y sus críticas a los medios de comunicación, su peculiar "obsesión" con la guerra fría, su estudio de "la cultura del terrorismo" y se despide con el mismo mensaje que Chomsky deja a sus seguires: "En esta nueva sociedad lo único que nos queda es la lucha. Luchar en contra de los prejucios y por la libertad humana".