Descubren dos nuevos rollos de la Torá judía cerca del Mar Muerto.

Dos pergaminos que datan de la última revuelta judía contra los romanos en Judea, alrededor del año 135 de la era cristiana, y en los cuales figuran fragmentos de la Biblia, fueron descubiertos recientemente por un grupo de arqueólogos, cerca del Mar Muerto, en la cueva de Nahal Arugot. Publica Cultura Clásica Los dos rollos de cinco por siete centímetros, en los cuales figuran extractos del Levítico en hebreo, fueron encontrados en una gruta de Nahal Arugot, cerca de las fuentes de Ein Guedi, en el desierto de Judea, en los confines de Cisjordania e Israel, según anunció el Departamento Israelí de Antigüedades. El hallazgo es el primero de los últimos cuarenta años en esa región y sorprendió a los arqueólogos, que estaban convencidos de que las grutas del desierto de Judea ya habían revelado todos los secretos que ocultaban desde la era romana. "Todo esto es simplemente sensacional. Un viejo sueño que se concreta", aseveró entusiasmado Hanan Eshel, director del departamento de Arqueología de la Universidad Bar Ilan de Tel Aviv, quien recorre desde hace 20 años el desierto de Judea, a orillas del Mar Muerto, levantando piedra por piedra en busca de pergaminos bíblicos, su especialidad. Los últimos pergaminos fueron encontrados el 23 de agosto de 2004 por beduinos que buscaban piezas de alfarería antigua para vender. Cuando fueron descubiertos, en el suelo de la gruta, los nuevos pergaminos estaban cubiertos por una espesa capa de polvo que, milagrosamente, los protegió durante casi 2.000 años. Hanan Eschel los adquirió por 3.000 dólares tras regatear con los beduinos, que inicialmente pedían 20.000. "Gracias a este nuevo hallazgo, sabemos un poco más sobre el convulsionado período de la revuelta del pueblo judío contra los romanos", agregó Eshel. La sangrienta revuelta de Bar Kochba, en el año 130 después de Cristo, causó la destrucción de 900 pueblos y localidades judías, mientras que las tropas del Imperio Romanao perdieron unos 10.000 hombres. "Hoy sabemos que estos pergaminos forman parte de un rollo de la Torá, que los judíos leyeron en la primavera del 135, durante la Pascua judía, cuando se preparaban para esconderse en las grutas para escapar a los temidos legionarios romanos", agregó el profesor de la Universidad Bar Ilan de Tel Aviv. Los historiadores estaban seguros de que los judíos habían logrado esconder 14 rollos de la Torá en las grutas de la región, de los cuales se encontraron fragmentos entre 1952 y 1965. "Con estos últimos pergaminos, se comprueba que había un decimoquinto rollo, y todavía no hemos terminado con los hallazgos", estimó un eufórico profesor Eschel. "Todo indica que esos pergaminos son auténticos", declaró por su parte el portavoz del Departamento de Antigüedades, Osnat Gouez, que destacó su importancia. En la misma región de los últimos hallazgos, pero a unos 50 kilómetros más al norte, los beduinos descubrieron en 1947 dentro de vasijas los manuscritos del Mar Muerto, que databan de unos dos siglos antes, en la época de los esenios y de Jesucristo.